Se cumplió un deseo compartido por los miembros del grupo desde hace años: encontrarnos con el Cárabo común (Strix aluco) que tiene como territorio el entorno de la estación ornitológica, cada noche se escucha a ambos miembros de la pareja reclamando y llamándose.
Por un capricho del propio ave entró en la única red para anillamiento científico que dejamos, pensando en estudiar la población de mochuelos de la zona (Muy diezmada) y con la ilusión de poder ver al Cárabo. Quiso darnos el gusto apareciendo, pasando muy cerca de donde nos encontrábamos cenando.
Es un ejemplar adulto, los Cárabos que hemos observado tanto por el pinar como en Estepa tienen el plumaje pardo, incluso rojizo, en contraste con otras poblaciones que son grises, y es que esta especie tiene una gran variabilidad de plumajes. Si se tienen la suerte de verlo durante el día o al atardecer es fácil de reconocerlo por sus ojos totalmente negros, su gran cabeza en comparación con el cuerpo y por la ausencia de los penachos de plumas llamados "orejas".
Cárabo común |
Detalle del ala. Cárabo común |
A la mañana siguiente y con un día extremadamente ventoso decidimos intentar anillar aves, pese a que hay riesgo de que las redes, al ser movidas por el aire, las puedan ver los pájaros y evitarla. Aun así el día no defraudó: Mitos, Carboneros garrapinos, Carboneros comunes, Mirlos comunes, Piquituertos, Escribanos montesinos, Herrerillos capuchinos, Herrerillos comunes, Gorriones comunes, Jilgueros, Verdecillos y Currucas cabecinegras.
Aunque algo nos lleva llamando la atención desde que empezó agosto: la falta de Zarceros políglotas, por estas fechas el paso migratorio es notorio y las capturas, junto con las parejas reproductoras, hacen que aumente los registros, este año ha sido muy escaso.
Carbonero garrapinos anillado |
Mito anillado |
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