El pasado sábado 20 de enero de 2018 tuvo lugar el primer anillamiento del año en esta estación de anillamiento, un día muy tranquilo en el que pudimos comprobar que ciertas especies comienzan a moverse y buscar territorios para la próxima cría, como las currucas cabecinegras (Sylvia melanocephala). Como dato curioso encontramos una curruca cabecinegra con restos de polen en la base del pico, hasta la fecha habíamos comprobado la alimentación de las currucas capirotadas (Sylvia atricapilla) buscando el néctar de las flores del hediondo (Anagyris foetida) (Enlace a la entrada: Curruca capirotada y polinización del hediondo). Es la primera vez que encontramos a esta especie con polen de hediondo en su plumaje, y es que los ejemplares de este arbusto que hay en el lindero de la finca se encuentra en plena floración.
Curruca cabecinegra con restos de polen |
Un hito ornitológico en esta estación de anillamiento ha sido el estudio por primera vez de un ejemplar de cogujada montesina (Galerida theklae), nos encontramos en un área de transición en la que puede verse las dos especies.
Anillamiento de cogujada montesina |
Este día fue el que aprovechamos también para la colocación de las cajas nido para el proyecto de lucha biológica y aumento de la biodiversidad en el olivar. Un total de 18 cajas nido para páridos y otras aves insectívoras.
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